Streaming/Cannes: crítica de «Atlantique», de Mati Diop (Netflix)
La película de la directora franco-senegalesa es una historia de hechos extraños y misteriosos que tienen lugar cuando una pareja de enamorados se ve obligada a separarse. Esta opera prima ganó el Gran Premio del Jurado en el Festival de Cannes y ahora se puede ver vía streaming.
El primer largometraje de la actriz y directora franco-senegalesa, tras unos muy promisorios cortos, toma como eje la experiencia de vida de las mujeres en Senegal en medio de un clima de opresión en el que los hombres tratan de emigrar a Europa por falta de trabajo sin saber si llegarán o no a destino. Ada (Mama Sané) y Souleiman (Ibrahima Traoré) viven un romance «prohibido» que parece andar de maravillas pero un día ella descubre que él se subió a un bote hacia Europa y ella se ve forzada a ser parte de una de esas bodas arregladas con un empresario. Pero todo se enreda cuando empiezan a suceder cosas extrañas, incendios, que pueden ser atentados o actos sobrenaturales, en contra del futuro marido en cuestión.
Diop se maneja en un terreno enigmático, en una zona ambigua entre el drama tercermundista, el policial y la película misteriosa de zombies y brujas, utilizando algunas tradiciones folclóricas locales e incorporándolas a la narración. De a poco no sabemos bien donde estamos parados. Si bien hay un detective de la policía que investiga el hecho, ¿qué de lo que está pasando es cierto? ¿Tendrá Souleiman, en la vida real o desde el más allá, algo que ver con esto?
Con clara influencia del cine de Claire Denis (para quien Diop actuó), ATLANTIQUE va dando más y más espacio y poder a Ada y a las otras mujeres que, a partir de las terribles circunstancias que les tocan vivir, tratan de disputar el poder y controlar la situación mediante métodos, digamos, no del todo convencionales. Una película extraña e inquietante, que sigue en la línea de lo realizado por Diop previamente y que le permitió ganar el gran premio del jurado en Cannes. Ahora, curiosamente, se la podrá ver vía Netflix. Digo, curiosamente, porque es una de esas películas, como HAPPY AS LAZZARO, que no son las que habitualmente se exhiben en esa plataforma.
Nota: la película se puede ver en Netflix siguiendo este link
