La película del director de “Un niño grande” narra la misión de un grupo de espías israelíes para capturar al criminal nazi Adolf Eichmann en 1960, en Argentina. Protagonizada por Oscar Isaac y Ben Kingsley, es una película cuya estructura, tono y diálogos atrasan medio siglo, transformándola casi en una parodia de la película que pretende ser y una verdadera banalización de la historia que quiere contar.