Excelentes números musicales y un homenaje formalmente impecable a los clásicos de la Era Dorada de Hollywood es lo mejor que tiene para ofrecer la nueva película del director de «Whiplash» que, lamentablemente, no esta a la altura de sus referentes a la hora de narrar una historia sensible, coherente y generosa con sus personajes y con el público. Protagonizan la notable Emma Stone y Ryan Gosling.