Estrenos: «Ella», de Spike Jonze
El mundo en el que vive Theodore Twombly parece diseñado para que nada funcione mal. Todo es cómodo, accesible, práctico. La ropa, los departamentos, las calles. Podría ser Los Angeles en un futuro cercano o un Paraíso bohemio-burgués donde solo se sirve comida orgánica y se usan pantalones vintage. Según Spike Jonze, todo parece indicar […]
El mundo en el que vive Theodore Twombly parece diseñado para que nada funcione mal. Todo es cómodo, accesible, práctico. La ropa, los departamentos, las calles. Podría ser Los Angeles en un futuro cercano o un Paraíso bohemio-burgués donde solo se sirve comida orgánica y se usan pantalones vintage. Según Spike Jonze, todo parece indicar que en el futuro viviremos en una versión multicultural de Palermo Hollywood.
Pero acaso todo no sea color… beige. Esta comodidad ha transformado a Theodore en un hombre solitario que no logra superar su reciente divorcio y prefiere ir de casa al trabajo y viceversa, pasando de una versión futurista de la PS3 al sexo online. Su trabajo consiste en escribir cartas ajenas pero –como la ley del guionista lo pide—si bien puede interpretar los sueños y deseos de otros, no sabe muy bien qué hacer con los suyos. Está bastante paralizado y ni siquiera una cita a ciegas que le arman con la bellísima Olivia Wilde lo saca de esa estilizada forma de depresión en la que vive.
Pero un día cambia la tecnología y Theodore es uno de los primeros en adaptarse. Sale a la venta un sistema operativo que interactúa con sus dueños como si fuera una persona real y la aparición de “Samantha” (con la voz de Scarlett Johansson) cambiará su vida de golpe. Será su amiga, su confidente e, inevitablemente, su pareja.
Si bien la trama parece sacada de una de las fantasías algo metafísicas de Charlie Kaufmann (un mix entre “¿Quieres ser John Malkovich?” y “Eterno resplandor de una mente sin recuerdos”), el guión de Jonze prefiere no apostar a las complicaciones tecnocráticas, centrándose en el núcleo emocional de la historia: ¿enamorarse de un ser virtual es más fácil y menos problemático que de una persona real? ¿O a la larga los conflictos y miedos que surgen en cualquier relación invadirán también ese espacio?
“Ella” es una historia de amor. O, más bien, una historia sobre el amor. Theodore no puede desprenderse del todo de su ex (el personaje de Rooney Mara parece inspirado en la ex de Jonze, Sofía Coppola) aún amando a “Samantha”. Y hasta la propia Samantha parece tener sus conflictos. “Ella” parece sugerir que la utopía tecnológica no resuelve el enigma de las relaciones humanas. La alegría, el miedo y el dolor, virtuales o no, siguen siendo los mismos.
(Crítica aparecida originalmente en el número de marzo 2014 de Los Inrockuptibles)
El sistema operativo y todo lo demás lo acepto, pero la cita con Olivia Wilde (la mismísima Trece de Dr. House) es inverosímil. Nadie le dice que no a Trece!!
Estoy de acuerdo, es absurdo!!!
En un mundo de inseguridad personal, en el que la gente ya ni es capaz de escribir sus propias cartas sentimentales, ni de hacer un garch & go sin previo compromiso casamentario, llega robotina 2.0 para bancar la parada.
El tema es que robotina va a aprender de esa gente insegura para terminar siendo el vil reflejo de la parte mala de la relacion, solo celos psicopata-problematicos sin tiradas de goma… claramente no termina siendo negocio.
Lo mejor de la peli es cuando la amiga les muestra su documental, les dice «porque en realidad somos realmente libres cuando dormimos» y la ven como si fuera una loca de mierda jaja… igual no le dan mucha bola a esto despues, una onda «ya fue yo tiro esta y si pasa pasa, alguno flasheara algo», algunos lo definirian como una «perroneada»
Hay un capitulo de Black Mirror que es medio parecido, bah! muy parecido, nada mas que dura la mitad y no tiene tan buena direccion artistica y vestuario.