TV: «Better Call Saul» (Temporada 2)

TV: «Better Call Saul» (Temporada 2)

por - Series
01 May, 2016 12:34 | 1 comentario

Pese a lo familiares que resultan muchos de sus elementos para los que vimos BREAKING BAD, es innegable que BETTER CALL SAUL es un show diferente, curioso, extraño. Similar a aquel show en menos cosas que lo esperable y, en muchas otras, dueña de un universo totalmente propio. Las similitudes están relacionadas a los escenarios, […]

bettercallsaul1Pese a lo familiares que resultan muchos de sus elementos para los que vimos BREAKING BAD, es innegable que BETTER CALL SAUL es un show diferente, curioso, extraño. Similar a aquel show en menos cosas que lo esperable y, en muchas otras, dueña de un universo totalmente propio. Las similitudes están relacionadas a los escenarios, obviamente, y a algunos personajes, especialmente en el sector «Mike» de la trama. Pero en el otro, el relacionado a Jimmy (aún no se lo conoce como Saul) es un programa completamente distinto, nuevo, casi no deudor del anterior. Este drama familiar y, en un punto, thriller legal, tiene poco y nada que ver con la anterior serie de Vince Gilligan, al punto que ni siquiera Jimmy es del todo la misma persona que terminará siendo Saul.

Est show no es para los impacientes o los que todo el tiempo esperan por pistas que los acerquen a BREAKING BAD. Le tomó más de un año a la serie, y a los espectadores, entender del todo de qué iba BETTER CALL SAUL, entrar en sintonía con sus tiempos y su lógica, que no intenta hilar puntas hacia ese destino sino que se construye como su propia entidad, una que en algún momento derivará en lo que todos conocemos. Pero, ya establecidos cómodamente aquí, no tenemos apuro alguno por llegar a ese destino.

better-call-saul-season-2¿En qué otro sentido es una serie distinta? En su puesta en escena, en sus modos narrativos. Si bien como showrunner, Gilligan conserva cierto gusto por el show off (un largo y elaborado plano secuencia aquí, algún extenso y complejo montaje musical por allá) no depende tanto de ellos como lo hacía BB. Es una serie más reposada, sin tanta búsqueda del shock o el impacto, y una que avanza de manera lenta pero segura a lo largo de la temporada a fuerza, casi únicamente, de las intrigas que surgen en las relaciones interpersonales.

El corazón de la serie está en las idas y vueltas de la relación entre Jimmy y su hermano Chuck, un abogado serio y prestigioso de una importante firma de la ciudad, que tiene un severo y extraño problema de salud. Son dos figuras opuestas: Jimmy es todo corazón, trampas y argucias; Chuck es frialdad absoluta, talento y experiencia legal. Chuck odia y recela a Jimmy de toda la vida, pero lo necesita por sus problemas físicos. Jimmy quiere ser respetado por su hermano, pero a la vez reconoce que por su forma de trabajar jamás será aceptado por él. Además, la prioridad para él es Kim, una abogada que se mueve a mitad de camino entre su deseo de trabajar de manera tradicional y su cariño (que no parece del todo amor, algo raro que tiene la serie) por Jimmy.

bettercallsaul2Esa mecánica familiar es en BCS mucho más importante de lo que lo es la parte que le dedica a Mike y sus primeros escarceos con los que, sabemos, terminarán siendo nuestros conocidos narcos mexicanos de BB. Las dos partes de la serie, más aún en esta temporada, parecen divorciadas entre sí, con mínimos cruces entre ambas. Para proteger a su familia, Mike decide enfrentar a Tuco y a su  tío, Héctor Salamanca, enredándose en las profundidades del territorio narco, pero a la vez toma conciencia de la dolorosa repercusión de algunas de sus decisiones.

Es en ese eje temático donde coinciden los personajes, más que las tramas: Jimmy y Mike viven similares situaciones, digamos, éticas. Ambos usan métodos no convencionales para enfrentar sus problemas (con narcos o con abogados, los dos polos opuestos de una batalla en la que ellos se ubican en el medio) y ambos se dan cuenta que no es sencillo generar un camino propio, ya que hay consecuencias impensadas que los llevan a tomar decisiones arriesgadas. A Jimmy lo traiciona su amor por su hermano –que supera a su fastidio con él y a sus profundas diferencias de todo tipo– y es ahí donde puede llegar a perder la batalla que, sabemos, de algún modo terminará perdiendo al dejar de ser Jimmy McGill y convertirse en Saul Goodman.

bettercall2La serie no se apura, profundiza en cada nuevo desarrollo narrativo, se explaya, frena. A diferencia de la más propulsiva BB, hay muchos episodios de BCS en los que la serie narrativamente parece no avanzar porque decide desarrollar a los personajes y los conflictos que los atraviesan. El personaje de Kim crece de manera notable –es la tercera pata de esta saga– y el suspenso mayor está puesto en si descubren o no unas fotocopias truchas. Tampoco en la parte Mike de la serie hay tanta acción. Es cierto que por la lógica de ese mundo hay armas, disparos y amenazas, pero buena parte del tiempo se le dedica a mostrar a nuestro sagaz sabueso planeando, espiando, preparando un ataque que nunca parece llegar.

BETTER CALL SAUL prueba, en su segunda temporada, el extraordinario talento de Vince Gilligan. Ha creado un universo propio y singular con algo que parecía apenas un «regalito» que le había hecho la cadena AMC por crear ese éxito que fue BREAKING BAD. Con este nuevo desafío de improbable suerte logró crear algo igual o hasta más interesante –por momentos– que su propia serie madre, una que depende poco y nada de la acción y el suspenso más clásicos que mantenían a BB siempre en una «zona caliente» narrativa. Acá, Gilligan se entrega a crear un drama familiar con sino trágico que nos mantiene pendientes de cada humana y ambigua decisión de sus personajes, la mayoría de ellos nuevos y no ligados al universo previo. Para los espectadores, BCS es una serie extraordinaria en cada aspecto. Como producto industrial, es casi un milagro.