Cannes 2012: Loach, Nougaret & Depardon, Dominik, Bejic, Toure

Cannes 2012: Loach, Nougaret & Depardon, Dominik, Bejic, Toure

por - Críticas
25 May, 2012 08:38 | Sin comentarios

Llegan las últimas 48 horas del festival y ya me quedan pocas películas para ver. Calculo que veré sólo unas cuatro más entre sábado y domingo con lo que terminaré por totalizar una abusiva cantidad de 50 películas. Si saco de ahí las cinco que vi antes de venir, me da unas 45 películas en […]

Llegan las últimas 48 horas del festival y ya me quedan pocas películas para ver. Calculo que veré sólo unas cuatro más entre sábado y domingo con lo que terminaré por totalizar una abusiva cantidad de 50 películas. Si saco de ahí las cinco que vi antes de venir, me da unas 45 películas en un poco menos de doce días. Tal vez en otros años lo podía manejar mejor. Ahora, si bien no estoy saturado en términos de tiempo (cuatro por día es manejable en un festival), sí lo estoy en cuanto a cantidad de información junta y, sobre todo, cansancio acumulado. Es que el festival arranca con una película 8.30 am, todos los días, y si uno se la pierde luego se complica recuperarla. Y aún pudiendo hacerlo, cuando se trabaja para la prensa diaria, como es mi caso, se supone que uno tiene que reportar sobre la competición de ese día. Así que uno llega como puede y hace lo posible por sostenerse bien durante el día laboral. Ya lo dije: los ritmos de los festivales de cine no son los mejores para… los festivales de cine.

Vayamos a las películas:

THE ANGEL’S SHARE, de Ken Loach. No puedo ubicarme en el Club de los Odiadores de Ken Loach, club que está creciendo en números mucho últimamente. Más allá de que lo considero un cineasta, digamos, menor, tiendo a entrar en sus relatos, me da cierto placer su mundo y sus personajes, y hay algo de esa constancia de esta última época que me atrae. Esta comedia es simpática, amable, ligera; no podrá confundirse con una gran obra y, salvo que Nanni Moretti saque su carnet del Club «Viva La Comedia!» (el cual no es un mal club, sólo que tendría que premiar a Hong Sangsoo y no a ésta) será rápidamente olvidada, como todos parecen haberse olvidado ahora, a unos 4 días de su pase, de que la película estuvo acá. Comedia sobre un ex presidiario «rehabilitado» como catador de whisky, THE ANGEL’S SHARE es banal, tiene chistes malos y personajes tibiamente delineados. Pero, a la vez, tiene -como dicen por ahí- «el corazón en el lugar correcto». Y eso le juega a favor. Bah, un poco…

JOURNAL DE FRANCE, de Claude Nougaret y Raymond Depardon. Este documental fue, en realidad, dirigido por Nougaret, sonidista de Depardon. Lo que dirigió el gran fotógrafo y cineasta son los materiales originales que ocupan buena parte del metraje. Porque «Diario de Francia» cuenta dos cosas y una de ellas es una revisión de Nougaret de cosas filmadas por Raymond que son inéditas y nunca se vieron, centradas especialmente en sus viajes en los años ’60 a zonas del mundo en conflicto. La otra es un viaje actual en el que Depardon recorre Francia en una minivan sacando fotos en lugares muy particulares en los que combina lo antiguo con lo moderno en un mismo plano. Tomando en cuenta esa mayor «convencionalidad» del relato respecto a las películas dirigidas por RD, se trata de un muy buen filme que sirve para conocer más al mítico fundador de la Agencia Gamma.

KILLING THEM SOFTLY, de Andrew Dominik. La película del director de EL ASESINATO DE JESSE JAMES POR EL COBARDE ROBERT FORD se basa en la novela negra COGAN’S TRAGE, de George V. Higgins (el autor de LOS AMIGOS DE EDDIE COYLE, llevada al cine en una gran película de Peter Yates). El libro es de 1974, pero fue adaptado aquí a la época del colapso económico y la campaña política de Barack Obama, entre 2008 y 2009. La crisis sirve de fondo constante a este filme de estilo entre «tarantinesco» y medio setentoso que mezcla largas secuencias de diálogos entre varios personajes pertenecientes al bajo mundo con escenas estilizadas e hiperviolentas de robos, peleas o asesinatos. Pasa bastante tiempo hasta que Pitt entra en escena. Al principio veremos la planificación y ejecución del robo a una mesa de póker por parte de dos bastante ineptos ladrones. Pitt llega a investigar quiénes son los responsables y a traer a alguien que los liquide, cosa que termina haciendo él mismo. Un gran elenco (que incluye a James Gandolfini, Ray Liotta y Richard Jenkins, entre otros) integra esten filme negro y duro que nunca se anima a  contar secamente solo a los personajes y sus raras historias y las «disfraza» con muchos fuegos artificiales visuales y un demasiado evidente «contexto político» que, por repetición, termina cansando a todos. Ya entendimos, Andrew, que la película «es relevante». Gracias. Andá apagando la tele de fondo…

DJECA, de Aida Bejic. Dardenniana al punto de parecer imitación del cine de los hermanos belgas, la película de Bejic tiene un par de muy buenos personajes: dos hermanos que viven solos ya que, entendemos, ambos estuvieron en un orfanato tras la muerte de sus padres durante la Guerra de los Balcanes. La relación tensa entre ambos, la vida de ella en su casa y en el trabajo, los problemas en los que se mete él (y la mete a ella, claro) en su escuela secundaria son los ejes principales de una película que, más allá de algunas escenas falsas o fuera de lugar, me parece sólida y coherente. Algunos colegas europeos la vieron «miserabilista» y cosas así. No coincido. Tal vez será la diferente perspectiva que, desde el Tercer Mundo, se tiene de la situación (dramática, pero no terrible/desesperante) que viven los protagonistas.

LA PIROGUE, de Moussa Toure. La vi muy al principio y quedó sin comentar. Correcta, previsible, directa, la película trata sobre un grupo de senegaleses que se embarcan en un pequeño barco con el deseo de llegar a Europa, a España más precisamente. Lo previo al  inicio, el viaje y una coda sobre el final. Eso es lo que tiene para contar la película, con personajes principales que también tienen conflictos internos de corte dramático también bastante «hollywoodense». La película va del «punto A» al «punto B» con precisión y, salvo la escena de pelea del principio, sin desviarse de su objetivo y su «mensaje». Ni más ni menos…