Chris Marker (1921-2012)

Si la expresión OtrosCines que nos cobija representa a algo o alguien, es a personajes tales como Chris Marker. Y lo hace en muchos sentidos. No sólo por el hecho de que Marker sea, tal vez, el más famosos de los cineastas secretos, de esos que no circulan por las salas de cine comerciales, sino porque en ese plural de «cines» se puede incluir toda su obra, que existe en distintos medios, formatos, expresiones y posibilidades, deformando la idea tradicional de «lo cinematográfico» hasta destruirlo en mil pedazos. Y también porque fue uno de los que más y mejor se unió a este medio virtual que, en más de un sentido, podría haber sido imaginado por él. O bien, porque su obra ha sido en parte inspirada por -e inspiradora de- este virtual tapiz de informaciones, sensaciones y experiencias en el que se ha transformado no sólo el cine sino nuestras vidas.

Las biografías de Marker ya pululan por toda la red y no tiene mucho sentido reiterar aquí todo lo que pueden encontrar con un rápido click a Wikipedia u otros sitios online (eso preferiría el propio Marker, calculo, que su muerte sea recordada con algún poético video lleno de links), y lo cierto es que también la mejor forma de recordar a Marker sería subir fotografías («de chicas y gatos», sus cosas favoritas en el mundo, pero no sólo de eso) y fragmentos de películas, tanto suyas como las que les han resultado centrales para comprender tanto el cine como el mundo.

Marker ha sido un cineasta de la Historia, pero de la historia transformada en una suerte de presente continuo, de investigación en vivo. Sus ensayos cinematográficos -eso es lo que son sus filmes, en definitiva, entre la «memoir» personal y la colectiva, indistinguibles entre sí- han ido observando el mundo y los modos en los que el mundo se observa a sí mismo, ya que no sólo Marker ha trabajado con imágenes propias, sino interpretando y reinterpretando imágenes ajenas, trabajando sobre el Archivo de la Historia del siglo.

Hay, en su recorrido fílmico que se extiende por más de 50 años, una especie de «seguimiento personal» por el fervor y posterior desencantamiento de los procesos revolucionarios de este siglo, que va cambiando también de formas: desde los «viajes comentados», los ensayos fotográficos, la resignificación de imágenes ajenas y las experiencias en formatos poscinematográficos como las instalaciones en video, los clips en YouTube o trabajos en diversos universos (CD ROMs, exposiciones interactivas, la experiencia «Second Life», una página web, www.gorgomancy.net). Y hay una mirada propia sobre el cine en relación a ese mundo y a su mundo.

Lo que, claro, Marker no podrá lograr, es que esa capacidad de análisis y síntesis del mundo a partir de la apropiación multimedial pueda ser sintetizada en este breve texto que intenta homenajearlo tras su muerte. Hay libros, DVDs, videos y habrá muchos más que lo hagan en el futuro inmediato. Estas pocas líneas y los links a dos clásicos filmes suyos -y a uno hecho por Isaki Lacuesta sobre él, y a algunas notas sobre su carrera- es un intento de recordar su trabajo, mucho más influyente y revelador que lo que hoy somos capaces de darnos cuenta. Padrino de estos «OtrosCines», Chris Marker ha muerto.

La Jetée (1962)

Sans Soleil (1983)

Las variaciones Marker (2007), de Isaki Lacuesta

Canal de Chris Marker en YouTube: http://www.youtube.com/user/Kosinki

«Un día en la vida de Andrei Arsenevich: http://scalisto.blogspot.com.ar/2008/12/chris-marker-une-journe-dandrei_12.html

Sobre Chris Marker:

Shangri-La: Carpeta Chris Marker: http://www.shangrilaediciones.com/Shangrila-Derivas-Ficciones-Aparte1.pdf

Chris Marker, el pensamiento en imágenes, por Roger Koza: http://ojosabiertos.wordpress.com/2009/09/02/chris-marker-el-pensamiento-en-imagenes/

Chris Marker, la invención de Morel, por Carlos Heredero: http://www.caimanediciones.es/EDITORIAL56.html (y toda ese dossier de la edición de Mayo 2012 de Caimán Cuadernos de Cine)