Cannes 2013: Kore-eda, Guiraudie, Coogler, Quillevere

Cannes 2013: Kore-eda, Guiraudie, Coogler, Quillevere

por - Críticas
18 May, 2013 01:16 | Sin comentarios

Es claro que no da el tiempo durante el Festival de Cannes para hacer críticas extensas de todas las películas que uno ve aquí, a razón de cuatro por día en mi caso. Pero, a la vez, se me hace necesario poder dar cuenta de ellas, aunque sea como minicríticas o reseñas que, luego, serán […]

Cannes-2013-PosterEs claro que no da el tiempo durante el Festival de Cannes para hacer críticas extensas de todas las películas que uno ve aquí, a razón de cuatro por día en mi caso. Pero, a la vez, se me hace necesario poder dar cuenta de ellas, aunque sea como minicríticas o reseñas que, luego, serán extendidas a críticas completas llegado el caso de que la/s película/s en cuestión se estrenen comercialmente o trasciendan la exhibición en el festival, algo que es imposible saber ahora. La diferencia entre las películas de las que hago críticas y de las que hago reseñas no tiene que ver con la sección ni con la importancia o «nombre» del filme en cuestión. Escribo más extensamente sobre las películas que me movilizan a hacerlo y menos sobre las que, bueno, las que no tanto… Así que aquí les dejo la primera entrega de reseñas de esas «otras películas» que se están viendo en esta lluviosa edición del Festival de Cannes.

like fatherLIKE FATHER, LIKE SON, de Hirokazu Kore-eda. Me gusta el cine de Kore-eda en general y especialmente cuando se centra en los lazos familiares, su especialidad, como queda claro en filmes como AFTER LIFE, NADIE SABE o STILL WALKING, los mejores de su carrera. Sin embargo, siento que no consigue ese mismo nivel de profundidad en esta película acerca de un matrimonio que descubre que su hijo fue cambiado al nacer en un hospital con el de otra pareja y que, a los seis años, deben tratar de ver cómo solucionan la situación. El plan consiste en, de a poco, ir «cambiando» de hijo, lo que obviamente no resultará nada sencillo. Kore-eda centra su narración en un empresario, que prioriza «la sangre» más allá de la relación establecida y promueve el cambio en cuestión. Lo mejor del filme está, más que en el cambio en sí, en la revelación que este padre tiene respecto a la forma en la que trata a su hijo (uno u otro, es indistinto). En cambio, la trama en sí, con sus opuestos muy marcados (niño tranquilo/niño revoltoso; familia yuppie/familia pobre) y la puesta en escena parecen estar más cerca del melodrama televisivo (o de la «Movie of the Week») que de las exploraciones más interesantes de estos mismos lazos que ya hizo el propio realizador japonés. Un poco larga, pero amable y llevadera, seguramente -como dicen por aquí- llamará la atención de Steven Spielberg, el presidente del jurado. Así que puede colarse entre las premiadas…

linconnuL’INCONNU DU LAC, de Alain Guiraudie. Este inclasificable director francés combina una trama hitchockiana con una comedia dramática que transcurre en una playa nudista gay muy particular. Entre situaciones humorísticas a veces producto de la propia situación (gran parte del tiempo casi todos los personajes están desnudos), un asesino serial anda dando vueltas matando a ocasionales amantes entre los pastizales que rodean la playa y en los que hay muchísima «acción». Sexo, mentiras y sangre, con un detective dando vueltas, generan una película curiosa, muy convencional para ser «de nicho», muy «de nicho» para ser accesible a todo el mundo. De cualquier modo, tengo la impresión de que se convertirá en una película de culto, a su manera. El público en la función parecía disfrutarla muchísimo. A mí me intrigó bastante al principio, pero se me fue volviendo un poco reiterativa… De cualquier modo, debería reverla.

fruitvaleFRUITVALE STATION, de Ryan Coogler. Premiadísima en el Festival de Sundance, esta opera prima se basa en una caso real, un incidente de «gatillo fácil» en la mañana del 1° de enero de 2009 en una estación de subte, luego de que la policía detuviera a un grupo de afroamericanos allí. La película mostrará esa escena -en apariencia real, tomada de alguno de los smartphones que la grabaron originalmente- para luego retroceder apenas un día y algo, y contarnos cómo llegamos allí. Y ahí conoceremos la historia de Oscar, un hombre que salió de la cárcel y está tratando de reintegrarse a su familia (mujer, hija, madre), dejando el alcohol y «las malas compañías». Pero lo echan del trabajo y por una serie de casualidades se irá viendo llevado a la situación dramática del filme, casualidades que pueden describirse como «ironías del destino», tomando en cuenta cómo y de dónde vienen. La película es un buen retrato de este hombre y su familia, con un nudo dramático que, no por previsible deja de ser intenso. Siendo directamente tomado de un caso real reciente, sobre el final la película cobra un alto nivel emotivo, quizás excesivamente empujado por una serie de «golpes bajos». La película seguramente será tenida en cuenta a la hora de las nominaciones al Oscar. No, no se trata de una trama ni una historia demasiado original, pero logrará llegar a los espectadores que no se sientan un poco «empujados» por ciertos chantajes emocionales…

suzanne-de-katell-quillevereSUZANNE, de Katell Quillevere. Sara Forestier (L’ESQUIVE, EL SIGNIFICADO DEL AMOR) queda embarazada, se escapa de su casa y se enreda con un delincuente y todas esas cosas terribles que pasan en algunas películas francesas en SUZANNE, la nueva película de Katell Quillevere vista en la Semana de la Crítica. Se trata, de cualquier modo, de una muy buena película que explora el lazo familiar entre un padre viudo y sus dos hijas, pero que no deja sufrimiento por repasar en su recorrido de décadas y décadas, desde la infancia a la adultez de esta mujer impulsiva e intensa que pone en riesgo, complica y arruina casi todo lo que toca. Un embarazo juvenil, un abandono, un novio mafioso, robos, cárceles: pasará de todo en la vida de Suzanne. El filme recorre esa experiencia de manera episódica, saltando años entre secuencias, lo que le quita un poco de peso y unidad a la historia. Una gran actuación de Forestier y una notable economía de recursos para llegar a la emoción son lo más destacable de esta película, que culmina con una excelente versión en vivo de Nina Simone de la canción de Leonard Cohen que da título al filme.