Cannes 2021: crítica de «The Story of Film: A New Generation», de Mark Cousins (Special Screenings)

Cannes 2021: crítica de «The Story of Film: A New Generation», de Mark Cousins (Special Screenings)

por - cine, Críticas, Festivales
06 Jul, 2021 04:23 | Sin comentarios

Continuación de «The Story of Film», el documental del crítico británico se centra en las películas del siglo XXI que empujan los límites del arte cinematográfico.

El crítico, periodista, académico y cineasta Mark Cousins se ha especializado, en la última década, en realizar documentales sobre la historia del cine, yendo desde lo general a lo específico. Su primer documental conocido se tituló THE STORY OF FILM: AN ODYSSEY (2011) y se extendía durante 15 horas. En la película –que se exhibió como miniserie por televisión–, el realizador iba narrando un personal y subjetivo recorrido por la historia del cine desde sus inicios hasta la primera década del siglo XXI. Si algo caracteriza a los documentales de Cousins –además de su acento de Irlanda del Norte, sus frases entrecortadas y su tono observacional– es que sus recorridos no son estrictamente clásicos, ni avanza por la historia del cine de una manera canónica ni académica. Lo suyo más bien es un viaje sensorial, impresionista, mitad profesor/mitad poeta, siempre en una zona que –depende del observador– puede parecer poética y bella o un tanto caprichosa e irritante.

En THE STORY OF FILM: A NEW GENERATION –película que se dará en Cannes como una suerte de preinauguración–, Cousins se centra en la segunda década del siglo XXI y en las películas y directores que estilísticamente han innovado el lenguaje en distintos géneros y con distintos estilos. Mucho más breve que el anterior (son 160 minutos), la película de Cousins va atravesando estas dos décadas a través de un recorrido por todos los géneros y encontrando en determinados films innovaciones y riesgos formales fascinantes, muchos de los cuales solemos pasar por alto. Cousins presta atención al cine de la India, pasa de películas comerciales como GUASON a títulos de Lucrecia Martel o Apichatpong Weerasethakul, pero siempre investigando detalles, escenas, momentos, puesta en escenas, formas en las que el lenguaje del cine se expresa físicamente.



Cuerpos, movimientos, usos del espacio, cortes específicos y llamativos. Cousins menciona algunos hitos de los géneros pero no siempre cae en las películas más reconocidas, deteniéndose en la argentina XXY para pasar de ahí a THE BABADOOK, de MOONLIGHT a BABY DRIVER, de GRAVEDAD a MIDSOMMAR, de MAD MAX 4 a FROZEN, de un film estonio a la exitosa película india PK, de Pedro Costa a Lav Díaz, de Claire Denis a Jennifer Kent. Por momento las conexiones son inquietantes, llamativas, interesantes de analizar, similar a lo que sucede cuando uno observa la clase de un profesor talentoso que compila escenas de películas y analiza lo que muestra de maneras creativas y originales. En otros, convengamos, las conexiones y los textos bordean lo caprichoso, con relaciones que solo existen porque él las fuerza.

De todas maneras, eso jamás se transforma en un problema. Por más antojadiza que puedan parecer sus conexiones en algún momento, poder observar una historia personal del cine narrada desde lo específico y no desde lo biográfico/cronológico que es como la mayoría de los libros y los documentales lo hacen es un ejercicio valioso. Se aleja, además, del concepto «grandes éxitos» o «cabezas parlantes» de tanta serie de este tipo hecha por HBO o CNN, cuyas «historias del cine» suelen ser una vergonzosa cadena de Grandes Momentos del cine norteamericano.

El film se divide en dos partes. La segunda está dedicada a films más experimentales, aquellos que «empujan los límites» del cine, acercándose a películas y a realizadores quizás menos conocidos por el público general o aún por los especialistas, o a aquellos que llevan al arte más lejos que lo imaginable. Aparecen HOLY MOTORS, ABOUT LEILA, UNDER THE SKIN, TEN, LEVIATHAN, entre muchos otros, mientras Cousins analiza los cambios tecnológicos que han permitido que hoy se puedan filmar (perdón, grabar) cosas que tiempo atrás hubieran sido imposibles, incluyendo títulos como TANGERINE, GOODBYE TO LANGUAGE y los films de Tsai Ming-liang, entre muchos otros films independientes, así como el impacto de los efectos digitales en las superproducciones. Para el final, Cousins se reserva unos minutos para hablar de la pandemia y de lo que puede pasar con el cine de acá en adelante.

Cousins cuenta además -supongo que a partir de la colaboración de las productoras de las películas seleccionadas– con extractos de films en excelentes condiciones, imágenes que dan ganas de revisar cada uno de los títulos mencionados. Eso sí, para todo aquel que lo vea, vaya la aclaración de que a Cousins no le preocupa mucho spoilear películas. Es, claro, la mejor forma de analizar en profundidad las películas de las que habla. Y entender todas las conexiones posibles entre las imágenes, las decisiones estéticas y los temas de los que esos films trabajan. Con su particular estilo, el curso de cine de Cousins sigue funcionando muy bien.