Cannes 2023: crítica de «Jeanne Du Barry», de Maïwenn (Apertura)

Cannes 2023: crítica de «Jeanne Du Barry», de Maïwenn (Apertura)

por - cine, Críticas, Festivales
16 May, 2023 07:20 | Sin comentarios

La película de apertura de Cannes narra la historia de una cortesana que logró convertirse en el gran amor del Rey Luis XV de Francia. Con Maïwenn, Johnny Depp y Pierre Richard.

Seamos sinceros: nadie espera demasiado de las películas de apertura de los festivales de cine internacionales. Y más aún cuando se presentan fuera de competencia. Es una manera que tienen algunos festivales de celebrar las industrias locales sin pelearla demasiado en el terreno de la calidad. Sin embargo uno tiende a esperar un poco más de Cannes, más que nada por la propia capacidad del festival de elegir más o menos lo que quiere dentro del mundo del cine internacional. Pero JEANNE DU BARRY no le escapa a ninguna de las convenciones de las películas de apertura de festivales. Es una película tan grande como mediocre y anodina, que solo tiene un lugar acá porque «muchas empresas a las que les interesa participar» han logrado colocarla. Y porque está un tal Johnny Depp.

El hoy controvertido actor estadounidense no es el protagonista de la película, pero es el que todos esperan ver. Depp, de hecho, es quizás el que más dignidad y criterio le pone a este show de vestuarios impecables de Versalles en la época de Luis XV. La verdadera protagonista de la historia es la también directora Maïwenn. Ella interpreta al personaje que da título al film, la célebre «Madame Du Barry», una chica que se fue volviendo cortesana, prostituta y que terminó conquistando al rey (Depp) pese al odio y a la oposición de familiares y demás habitantes maquillados del famoso palacio francés.

La película funciona como una biografía e intenta hacer un recorte social y de género eligiendo como heroína a una mujer de pocos recursos que se hizo valer frente a la aristocracia francesa que la juzgó por sus modos y maneras no especialmente prolijas para llegar a coquetear con el poder. Jeanne era una mujer de bajos recursos que llegó a contar con los favores del rey, además, gracias a su forma un tanto irrespetuosa de conducirse –no le salían los modales serviles apropiados– y por no vestirse como se suponía que debía hacerlo.

No era una rebelde ni una revolucionaria ni mucho menos: era parte del sistema real, solo que había logrado romper ciertas barreras internas. Y eso que la llevó a conquistar el corazón del rey la convirtió en enemiga de casi todos los demás habitantes del palacio. Se trata de una película que pone gran parte de su fuerza en la reconstrucción de época, vestuarios y maquillajes, pero que no tiene ningún gesto formal que la aleje de la convencionalidad. Para ser un film que defiende a alguien que se atreve a ser distinto, en lo formal la película no se atreve a nada, más que a seguir los caminos conocidos.

Alguna liviandad y ligereza propias de una comedia para adolescentes (por momentos parece una película que bien podría adaptar Disney en un film animado sobre la «chica distinta que se coló en el palacio del rey») le da cierto encanto, pero no dura demasiado. En el momento de ponerse seria la película lo hace como siempre lo han hecho en estos casos: volviéndose discursiva y falsamente emotiva. No es la MARIE ANTONIETTE de Sofía Coppola ni mucho menos (si bien el personaje aparece) sino más bien una Cenicienta un poco antes de la llegada de los muchachos con la guillotina. O alguna copia de BRIDGERTON pero en Versalles.

Párrafo aparte entonces para Depp, un actor que por más extravagante que haya sido y siga siendo su recorrido personal, siempre encuentra espacios para lucirse. Quizás sea uno que lo vio crecer y le tiene cariño, pero lo cierto es que pese a las cirugías estéticas y los excesos, cada vez que encarna a un personaje extravagante (como es este caso), logra encontrarle algo así como el corazón que le late bajo las capas de maquillaje. Lo ayudan algunos secundarios (como el gran Pierre Richard), pero no les alcanza para hacer de JEANNE DU BARRY una buena película. Apenas logran evitar una caída aún más grande.