Festival de Venecia 2023: crítica de «Behind the Mountains», de Mohammed Ben Attia (Giornate degli Autori)

Festival de Venecia 2023: crítica de «Behind the Mountains», de Mohammed Ben Attia (Giornate degli Autori)

por - cine, Críticas, Festivales
06 Sep, 2023 07:53 | Sin comentarios

En este film tunecino del director de «Hedi», un hombre que sale de la cárcel después de cuatro años se lleva por la fuerza a su hijo a un viaje con el fin de mostrarle un extraño secreto.

Mohammed Ben Attia, uno de los más reconocidos realizadores tunecinos –director de HEDI y DEAR SON, dos películas que pasaron, respectivamente, por los festivales de Berlín y Cannes– desembarca en esta ocasión en Venecia con su tercera y más riesgosa película, un no del todo logrado experimento que coquetea con el realismo mágico a partir de contar la historia de un oscuro y perturbado personaje que está convencido que tiene ciertos poderes.

El comienzo es llamativo. Rafeek (Majd Mastoura, el protagonista de HEDI) empieza a romper las computadoras en lo que parece ser su trabajo y termina tirándose por la ventana. Sobrevive al golpe y termina en la cárcel, pero una vez allí no tiene mejor idea que volver a acercarse a otra ventana y tirarse de allí también, sobreviviendo otra vez al impacto. Silencioso y con cara de ofuscado, es difícil saber qué pasa por su cabeza. Si bien da la impresión de intentar suicidarse una y otra vez, algunos indicios permiten pensar que, en realidad, el motivo de sus lanzamientos al vacío es otro.

La película retoma su vida varios años después, ya separado de su esposa y sin contacto con su hijo pequeño. El hombre, para reconectarse con él –o eso al menos es lo que parece– no tiene mejor idea que llevárselo del colegio a la fuerza en lo que no es otra cosa que un secuestro. El pequeño, que apenas lo recuerda, intenta resistirse pero no puede. Y el padre no tiene mejor idea que meterlo en un auto y llevárselo de la ciudad hacia, como dice el título en inglés del film, «detrás de las montañas».

¿Cuál es el objetivo del hombre y por qué hace lo que hace? Conviene no spoilearlo aunque, por las extrañas costumbres de este indescifrable cuarentón uno puede imaginarlo. Estando en camino y tras un accidente, a Rafeek se le unirá en el viaje un campesino –más silencioso aún que él y con algún signo de retraso– y los tres seguirán viaje metiéndose en más problemas. Promediando la película se detendrán en una casa para intentar pasar la noche allí y las cosas pegarán un vuelco inesperado.

Ben Attia tiene un evidente talento para crear situaciones inquietantes y tensas –la estadía en la casa funciona como una película de terror aún sin realmente serlo– pero BEHIND THE MOUNTAINS es demasiado amable, si se quiere, con el monstruoso personaje que la protagoniza, un hombre evidentemente perturbado que comete un delito tras otro en pos de probar algún tipo de superpoder que dice tener. En algún sentido –y si no fuera por los giros impensados de la trama– bien podría ser la historia de origen de algún villano de cómics.

Durante la larga estadía en la casa de campo en la que intentan refugiarse Rafeek utilizará modos no muy amables que digamos con la familia que vive allí, quienes en cierto momento pasarán a ser coprotagonistas de la película y personajes sin duda más interesantes que el trío central. Metiéndose en la mecánica de este grupo, BEHIND THE MOUNTAINS se verá a modo de thriller psicológico. Pero la película está tan lanzada a probar o demostrar hasta dónde puede ir con su metáfora central que es más que previsible que las cosas llegarán hasta las instancias más dramáticas posibles.

El mayor problema del film quizás no sea ese sino que, veladamente, es una película que parece aceptar que, por amor a su hijo, un padre puede literalmente hacer cualquier cosa. Seguramente no fue esa la intención de Ben Attia al crear a este personaje –al que de entrada se ve como muy border–, pero esa es la sensación que persiste hasta el final y que termina complicando poder apreciar este drama, más allá de sus buenos momentos.