Estrenos online: crítica de «Ninjababy», de Yngvild Sve Flikke (MUBI)
Una joven de vida caótica se entera de golpe que está embarazada de seis meses y debe decidir qué hacer en esta original comedia dramática noruega de 2021. Disponible en MUBI.
Estrenada el mismo año que THE WORST PERSON IN THE WORLD, esta película también noruega quedó opacada por aquella premiada en el Festival de Cannes y nominada al Oscar pero tengo la impresión que es mejor, más honesta y directa, a la hora de hablar de muchos de los mismos temas. Las diferencias principales pasan porque su protagonista es acá más joven y su conflicto es más específico y limitado en el tiempo, pero ambos films comparten muchas cosas, especialmente una mirada directa, sin vueltas ni sentimentalismos, a las vidas de dos mujeres que tratan de armar, a los tumbos, su propio camino en la vida.
Rakel (Kristine Kujath Thorp) tiene 23 años y es medio un desastre. Comparte departamento con una amiga mucho más organizada que ella y parece vivir de fiesta en fiesta, despreocupada, con un cuarto caótico que no parece haber limpiado en meses. Dibuja esbozos de cómics en sus ratos libres, pero no avanza mucho con eso. Un día, a Ingrid (Tora Christine Dietrichson), su compañera de piso, le resulta raro verla comer mucho y otros hábitos curiosos que Rakel ha desarrollado. Le pregunta si está embarazada y ella asegura que no, aunque no recuerda cuando fue su última menstruación. Ingrid insiste, Rakel se hace el test y sí, da positivo.
Rakel está convencida que el padre es Mos (Nader Khademi), un cálido y simpático profesor de aikido con el que tuvo sexo una noche unos pocos meses antes. Y el tipo, tras anoticiarse del asunto, la acompaña a abortar. Pero allí, para sorpresa de ambos, le dicen que está embarazada de seis meses –no tenía mucha panza pero le aseguran que eso puede suceder– y es imposible abortar a esa altura. La chica desespera, pero no hay solución. Al menos, no por ese lado. Siempre se puede entregar en adopción. O averiguar quién es el padre y encajárselo a él.
Y así las desventuras de Rakel se inician, en tono de comedia dramática, con la chica investigando en asociaciones ligadas al tema, colándose en grupos de padres que buscan adoptar –a los que maltrata–, encontrando al probable padre verdadero del bebé (lo llaman «Jesus, el pito»), buscando otras soluciones con su familia y hasta iniciando un romance con Mos, que pese a no ser el padre quiere estar con ella de todos modos. Pero el film no ofrece soluciones fáciles. Rakel realmente no sabe qué hacer y su confusión se mantiene hasta último momento, evitando el tipo de cierre sencillo que tendría una versión hollywoodense.
La directora Flikke le agrega un toque de humor y de ingenio a la película al utilizar dibujos en muchas de las escenas, muchos de ellos visualizados también por la protagonista. De hecho, el título NINJABABY viene de ahí: ella dibuja al bebé en su panza y empieza a tener diálogos con él, que le contesta de manera ácida y por momentos muy graciosa, en especial cuando ella está «seleccionando» potenciales padres adoptivos. El prefiere a Angelina Jolie…
Este tono entre ramplón y sarcástico se mantendrá aún cuando las cosas entren en una zona un tanto más densa con el paso de las semanas y la constante indefinición de Rakel acerca de qué hacer. Quizás utilizados como forma de mantener la conexión entre la película y la novela gráfica original de Inga Sætre, los dibujos se combinan muy bien con el mundo más realista que presenta la película. Y si bien se nota la búsqueda de efecto, la mezcla fluye casi sin puntos bajos.
NINJABABY es un coming-of-age honesto y fresco que puede ser áspero y hasta brutal –los escandinavos tienden a confundir a veces honestidad con shock y hasta con crueldad–, pero que jamás reduce a los personajes a caracterizaciones simples sino que encuentra la complejidad en todos ellos, aún en el que parece más «impresentable» cuando lo conocemos. Sí, me refiero a «Jesús el pito» con su poster de Cristo fumando marihuana y su irrefrenable apetito sexual.
Pero la película es la historia de Rakel, una chica con problemas creíbles y una confusión acerca de qué hacer con su vida más que lógica. No tenía pensado ser madre y está convencida de no querer serlo, pero ante la imposibilidad de abortar sus prioridades se mezclan y su vida cambia. Al principio se vuelve aún más caótica que lo que ya era. Luego, sin dejar de ser complicada, le permitirá verse a sí misma desde otra perspectiva.