Series: crítica de «JFK: El día que paralizó el mundo» («JFK: One Day in America»), de Ella Wright (Star+)

Series: crítica de «JFK: El día que paralizó el mundo» («JFK: One Day in America»), de Ella Wright (Star+)

Esta serie documental de tres episodios se centra en el asesinato de John F. Kennedy en Dallas, Texas, el 22 de noviembre de 1963, focalizándose en los días centrales del trágico evento. Desde el 6 de diciembre por Star+.

A sesenta años de los hechos –el 22 de noviembre se cumplió el aniversario–, es poco lo que parece poder agregarse sobre el asesinato de John Fitzgerald Kennedy, un hecho histórico que disparó incontables análisis, libros, películas, teorías conspirativas y que es considerado, un poco torpemente, como «el día que los Estados Unidos perdieron la inocencia», algo que analizando los siglos de esclavitud que tuvo ese país suena poco menos que banal. ¿Qué tiene entonces para agregar este documental? Para los que conocemos la historia más o menos bien, lo más llamativo pasa por la calidad de las imágenes, restauradas y en ciertos casos coloreadas, y por una intimidad que pone la cara muy cerca de los hechos. Aquí no se trata de formular una teoría respecto a lo sucedido sino de contar, momento a momento, qué fue lo que pasó.

Producida por National Geographic, JFK: ONE DAY IN AMERICA es una miniserie de tres episodios de 40 minutos que, convengamos, bien podría haber sido una película de dos horas y ya. Quizás lo más distintivo que tenga, más allá de las imágenes, sean los testimonios de una decena de testigos, sobrevivientes hoy en su mayoría octogenarios de aquel momento, que lo vivieron desde una posición, digamos, privilegiada. Dos de ellos, parte del Servicio Secreto, ocupados de la seguridad de Jackie Kennedy, la Primera Dama. Otros, periodistas, o colegas y vecinos del asesino Lee Harvey Oswald. Ellos agregan emoción y cercanía a los acontecimientos.

Quizás lo mejor esté en el primer episodio, que muestra el día previo al asesinato y se centra en la llegada de la pareja presidencial a Dallas. Impresiona ver allí la locura que provocaba en la gente la Primera Dama, quien con sus atuendos y su look era considerada una diva. Jackie lo había acompañado a JFK para arrancar en Texas, un estado difícil para el Partido Demócrata, la campaña para la reelección, que sería un año más tarde. Esos recorridos, desayunos, comentarios de la gente y periodistas dejan en evidencia que ella era tan o más popular que él, en especial en una ciudad con muchos enemigos políticos para él, algo que quedaría en evidencia al día siguiente.

Ya en el segundo episodio vemos y se nos cuentan cosas más conocidas por la historia oficial. Los disparos al auto, la desesperante llegada al hospital, las noticias de su muerte, el shock generalizado (acá se lo muestra en el orden local, sin salir de Dallas), el descubrimiento del potencial asesino, su detención, lo que pasó luego con él y así. Y el tercero no ofrece muchas más novedades, más allá de la emoción de los que lo recuerdan o algunas imágenes que impactaron entonces y lo siguen haciendo ahora, como la del hijo de JFK saludando con la venia el paso del féretro de su padre.

El formato ONE DAY IN AMERICA, que NatGeo ya había usado en un documental sobre el Atentado a las Torres Gemelas, lo que trata de hacer es traer un día histórico al presente, transmitir la sensación de que eso que sucedió décadas atrás podría estar pasando hoy mismo. Es eso, más que cualquier tipo de análisis contextual, de los hechos o político, lo que impacta al verlo. La cristalina calidad de muchas de las imágenes que se ven acá sacan a JFK y a Jackie de los libros de historia y los muestran como seres vivos, casi al alcance de la mano. Y esa cercanía a la humanidad de una persona a punto de a ser víctima de una brutal crimen –por allí se ve también a Martin Luther King y a Robert Kennedy, dos que unos años después sufrirían similares finales– engrandece aún más su costado trágico.