Estrenos: crítica de «Asesino serial» («Strange Darling»), de JT Mollner

Estrenos: crítica de «Asesino serial» («Strange Darling»), de JT Mollner

por - cine, Críticas, Estrenos
04 Dic, 2024 11:28 | Sin comentarios

Una tensa aventura sexual entre un hombre y una mujer deriva en una violenta y sangrienta persecución en este sorprendente thriller de terror. En cines desde el 5 de diciembre.

Da la impresión, buena parte del tiempo, que el subgénero asesino en serie no tiene ya mucho más para ofrecer tras incontables relatos de ficción y el un tanto reciente boom de los documentales true crime dedicados a contar las muchísimas historias aplicables al género. Pero siempre hay sorpresas, películas que por una u otra razón llaman la atención, movilizan, intrigan, sorprenden. ASESINO SERIAL es uno de esos films. No desde el anodino título local (el original es más intrigante y misterioso) sino desde la perspectiva y estructura en la que se lo cuenta, desde su tono y, más que ninguna otra cosa, desde su sorprendente factura.

Todo comienza con una imagen bastante icónica acerca de lo que sucede, sucederá o sucedió: una mujer herida escapa de las manos de un hombre armado que la persigue. Pero en esta película, filmada en 35mm, las historias tienen sus giros inesperados. Es ahí que nos enteramos que Mollner, cual émulo de Quentin Tarantino (en más de un sentido), ha decidido contarnos su historia en seis capítulos y que los irá mostrando desordenados cronológicamente. Y lo que parece un capricho y hasta una deferencia a la influencia de QT, es en realidad un efecto calculado para maximizar las sorpresas de la trama.

Hay un texto inicial en el arranque de STRANGE DARLING en el que nos cuenta que lo que veremos es la última etapa de la «carrera» de un asesino serial que está matando gente en varios estados del Oeste norteamericano y lo buscan por las autoridades. Si bien el look del film le da un clima setentoso, se supone que todo esto sucede a fines de la década pasada. Y lo que veremos transcurre a lo largo de muy poco tiempo en un pueblo pequeño y zonas rurales de Oregon.

Aclaración: por la forma en la que está narrada la película y para no cometer potenciales spoilers solo contaré lo más básico de su estructura. De todos modos, están avisados.

Cuando el film comienza estamos en el cuarto episodio y vemos a una mujer a la que solo se conoce como «The Lady» (interpretada por Willa Fitzgerald) siendo perseguida por un hombre, «The Devil» (Kyle Gallner) a través de una ruta desolada y bastante solitaria. De ahí el film se moverá para atrás y para adelante, pero el origen cronológico de la historia estará en un aparente «one night stand», un encuentro sexual nocturno entre estas dos mismas personas. Encuentro sexual que irá poniéndose más intenso y violento de maneras improbables. Y lo que sucede en ese lugar se conectará con lo que vimos antes pero que en realidad sucederá después. Solo que al volver sobre esa persecución nuestras ideas sobre lo que estamos viendo quizás no sean las mismas.

Más que la trama y la estructura, lo primero que sorprende es el look del film, que tiene como director de fotografía nada menos que al actor Giovanni Ribisi, haciendo su debut como fotógrafo y mostrando un enorme talento, lo que le permitiría cambiar de profesión cuando se le de la gana. Pese a transcurrir hace poco tiempo, STRANGE DARLING remeda en su aspecto visual a los slasher films de los años ’70 y con un uso del color que remeda al giallo italiano, otro subgénero del terror que se ocupaba bastante de los asesinos en serie. Pero esta no es una película acerca de la investigación de un crimen, sino una centrada en el momento exacto en el que el crimen se está por producir, solo que movida de centro por impensadas derivaciones en la historia y en las actitudes de los personajes.

Aparte de su impacto visual y de la brutalidad de sus escenas violentas, ASESINO SERIAL usa de un modo inteligente el tema del control de la violencia y de quién, cómo y por qué la usa. La «Dama» y el «Diablo» se conocen en una cita y, si bien ella tiene miedo de que él sea un tipo violento, a la hora de pasar a la acción a ella le gusta jugar con los límites del dolor, controlando las acciones en la cama, algo que al hombre le resulta un tanto incómodo. Ese juego de gender roles es central para entender el atractivo, el riesgo y hasta la provocación que propone Mollner, una película que se pone del lado opuesto a la corrección política, aún a riesgo de ubicarse en un lugar por demás incómodo.

La película juega con el tema del control de la violencia, con las expectativas que cada uno se hace respecto a lo que pasa según el género al que pertenezca y con los lugares comunes o clichés esperables en una relación así. Todo eso permea al espectador de entrada y lo hace jugar un juego de ideas que excede lo que pasa en la pantalla. STRANGE DARLING es una película muy de género como para pretender que ofrezca un análisis más complejo de las relaciones entre los hombres y las mujeres cuando la violencia está de por medio –a veces le importa más a Mollner generar un efecto que ser consistente en sus observaciones–, pero las sutilezas y zonas no exploradas de esa relación se ponen en primer plano.

Un film sangriento y voraz, con dos actuaciones impactantes –especialmente la de ella, feroz aún con el cuerpo malherido– y un clima opresivo y desesperante que crece a cada minuto, ASESINO SERIAL es un film de terror que se atreve a ser malvado, perverso, a no darle al espectador espacio alguno para sentirse cómodo o más o menos seguro. Acá, nada se sostiene en pie durante mucho tiempo. A todo se lo lleva puesto el instinto de supervivencia y la persuasiva idea de que aún los asesinos más bestiales creen que sus crímenes están justificados. El Diablo es una metáfora que, a veces, se pega una vuelta por el mundo real.