Locarno 2025: crítica de «The Fin», de Park Syeyoung

Locarno 2025: crítica de «The Fin», de Park Syeyoung

por - cine, Críticas, Festivales
11 Ago, 2025 07:59 | Sin comentarios

Esta película de ciencia ficción coreana transcurre en un futuro post-apocalíptico en el que los habitantes del país tienen que perseguir y eliminar a unos supuestamente peligrosos mutantes.

Política en su temática pero más que nada poética en su tono, THE FIN es un curioso relato de ciencia ficción coreana que toca un tema actual y preocupante, pero lo hace de una forma en extremo lateral y deliberadamente opaca. La historia transcurre en Corea en un futuro devastado tras una catástrofe ecológica en el que, en apariencia, el país se ha unificado bajo un tipo de gobierno más parecido al del norte que al del sur. En ese país, para mantener bajo control a la población, han identificado un enemigo en común que pone en riesgo la supervivencia de la especie. Se trata de humanos con una mutación física a los que llaman Omega y que son identificables, supuestamente, por una serie de factores específicos: el olor que tienen, los ruidos que hacen y unas «aletas» (fins) que parecen poseer en lugar de pies.

La historia se centra más en las experiencias de tres personajes. Uno de ellos es Sujin (Pureum Kim), una chica que parece como todos los habitantes tomarse a pecho las directivas del gobierno, que incluye delatar a los Omega para que los terminen echando del otro lado de la frontera o, directamente, para que los maten, ya que les aseguran que sus ruidos pueden enloquecer y liquidar a cualquiera. Pero los Omega están entre ellos y no solo es complejo identificarlos sino que pueden ser tus amigos, tus vecinos, hasta tus familiares.

En la Colonia específica en la que está Sujin encontramos también a Mia (Yeji Yeon, de la serie PACHINKO), que vive rodeada de muchos Omegas que son los que hacen el trabajo sucio que los demás no quieren hacer, como limpiar la polución causada por el desastre ecológico. Uno de estos Omega (Goh-Woo), que no tiene nombre, la busca a Mia por motivos que luego se revelarán. Y el shock para los que los ciudadanos que logren atravesar la barrera de la propaganda oficial será, más que nada, darse cuenta que quizás aquello que le contaron tenga bastante más de mito que de realidad. O que, al menos, es más complejo de lo que parece.

Saturada hacia colores ocres y naranjas, con una imagen que por momentos es más cercana a la del cine experimental que a la de una película convencional de ciencia ficción, THE FIN es un poco esquiva a la hora de desarrollar su historia, como si el realizador quisiera hacerla más enigmática y misteriosa de lo que es. Y eso, por exceso, le juega en contra a una propuesta que atrapa en un principio pero que con el correr de los minutos se va volviendo más confusa, enredada y hasta cierto punto tediosa. El eje temático sigue siendo inquietante, además de actual y político –no solo en Corea sino en todos los países en los que crece el odio a los inmigrantes–, pero la potencia del film se va esfumando hasta perderse en esos rojos, naranjas y amarillos que la tiñen.

Es una película con una frondosa imaginación visual y mucho clima, pero a la que le cuesta ir más allá del tono que presenta. Hay algunos momentos de alto impacto, sobre el final, pero acaso lleguen demasiado tarde. La melancólica puesta en escena y la extrañeza de los ambientes y los personajes puede ser seductora inicialmente pero termina resultando excesiva, como si alguien intentara recrear ese tono y tempo de la ciencia ficción reflexiva al estilo BLADE RUNNER, pero sin poder hacerlo. Es evidente que no tiene el presupuesto de aquel clásico film y que con muy poco logra bastante, pero por momentos el film parece demasiado enamorado de su autopercibida cualidad poética. Y se enreda demasiado en eso hasta que no encuentra la salida.