Venecia 2025: crítica de «Mother», de Teona Strugar Mitevska (Orizzonti)

Venecia 2025: crítica de «Mother», de Teona Strugar Mitevska (Orizzonti)

por - cine, Críticas, Festivales
27 Ago, 2025 02:47 | Sin comentarios

Calcuta, India, agosto de 1948. Teresa, Superiora del convento de las Hermanas de Loreto, espera la carta que le permitirá dejar su monasterio y fundar una nueva orden en respuesta al llamado de Dios. Y cuando todo parece estar listo se encuentra ante un dilema que pone a prueba sus propias ambiciones.

La vida de la Madre Teresa de Calcuta ha tenido sus controversias, más allá de su fama y merecida celebridad. A su modo –aunque sin hablar de eso–, la película que recoge un momento clave en su vida refleja también esa dualidad, una mujer que podía ser generosa al extremo de vivir en la pobreza dándolo todo por los más necesitados pero también una persona dura, inflexible y atada a ciertas tradiciones milenarias.

Teresa (Noomi Rapace) vive en Calcuta y es la que maneja un convento que trabaja en esa zona y la película transcurre durante la semana en la que la monja espera una respuesta del Episcopado acerca de si le permiten abrir su propia orden, una que se dedique por completo a colaborar con los más pobres. Pero para llegar a eso, además, tiene que nombrar a una sucesora. Y su elegida es la Hermana Agnieszka (Sylvia Hoeks), con la que mejor se lleva y entiende. Pero pronto queda claro que hay un problema: Agnieszka está embarazada.

Más que intentar ayudarla, Teresa se enoja y violenta con la atribulada monja. Y como Agnieszka no tiene adonde ir, la única opción que parece existir para que pueda quedarse en el lugar es hacerla secretamente abortar. Pero eso es algo a lo que Teresa se niega, aún contra la opinión de los que –sin decirlo abiertamente– saben que algo así está sucediendo, incluyendo al Padre Friedrich (Nikola Ristanovski), un cura bastante progresista con el que tiene una buena relación, y hasta un médico local que le indica los pasos a seguir.

Ese conflicto entre su deseo por montar su propia orden y estar aún apegada a tradiciones serán centrales a lo largo de un film que, de entrada, toma algunas decisiones radicales de puesta en escena y musicalización. Mitevska se aleja por completo de las convenciones de un film de época mediante una planificación visual muy intensa, con la cámara por momentos encima de los protagonistas y algunas secuencias organizadas de una manera, si se quiere, bastante moderna. Y el uso de la música es también muy particular, ya que incluirá canciones de Tool y Black Sabbath en medio de este drama religioso.

Las elecciones podrán parecer un poco extrañas, pero en general funcionan bien, sacando a MOTHER del lugar más típico del drama de época. Rapace se luce porque entiende que su Teresa es una mujer complicada, generosa y egoísta a la vez, que quiere poder tener su propia orden para ayudar a los demás pero también buscando algún tipo de gloria personal. No es una heroína y menos una villana, pero su trato con Agnieszka –que va perdiendo la sanidad mental con el paso de los días– revela los límites de su empatía, de su trato hacia los otros. A su modo, el film elige hacer ese recorrido junto a ella, el que va desde el deseo por conseguir un logro personal a algo más parecido a la entrega verdadera.