Series: crítica de «Detrás de sus ojos», de Steve Lightfoot (Netflix)
Un triángulo romántico entre un psiquiatra, su esposa y su secretaria toma rumbos perturbadores y enrarecidos en esta miniserie enigmática pero un tanto frustrante del creador de «The Punisher».
Para destacarse dentro de una programación constante de estrenos de series, miniseries y derivados, el mercado parece pedir algo que se destaque: por lo original, lo arriesgado, lo imprevisible. Ese tipo de aditivo adicional suele ser un problema ya que, después, el producto entregado debe estar a la altura de la promesa. DETRAS DE SUS OJOS –adaptada de la novela de Sarah Pinborough– se vendió por su final sorpresivo, uno de esos eventos que hacen repensar todo lo visto hasta el momento. Y si uno va a ver la serie británica solo por eso muy probablemente se sienta decepcionado.
Esta es la clase de producto que divide a los espectadores entre los que piensan que sin un buen final la experiencia no vale la pena. Estamos los que no creemos eso. Puedo ver una película, disfrutarla y sentirme decepcionado por su final pero no por eso dejo de apreciar las cualidades que me mantuvieron atento, interesado e intrigado durante el resto de su duración. Acá, sin embargo, ese tipo de análisis se complica ya que la resolución involucra volver a pensar toda la experiencia y darse cuenta que, finalmente, no tuvo demasiado sentido.
Voy a dividir esta crítica en dos partes. La primera no tendrá SPOILERS alguno y luego ya sí, lo que será avisado en su momento. DETRAS DE SUS OJOS puede verse como un thriller acerca de un triángulo amoroso complicado entre un psiquiatra, una empleada de su estudio y la esposa de él. A lo largo de los episodios se nos va dando la idea que hay algunos elementos de la trama que podrían considerarse dentro del espectro de los desórdenes mentales o bien directamente algo más cercano a lo mágico/sobrenatural. De todos modos, la serie avanza sin aclarar realmente cómo debe leerse su trama al menos hasta sus últimos episodios.
Louise (Simona Brown) es una mujer divorciada con un niño que conoce a David (Tom Bateman), un escocés recién llegado a Londres, en un bar. A la salida prometen irse cada uno por su lado pero terminan besándose. Unos días después ella va a su trabajo y descubre que David es uno de sus nuevos jefes, uno de los psiquiatras del estudio. No solo eso sino que se entera ahí también que está casado con Adele (Eve Hewson), que lo acompaña. Con el paso de los días Louise, en paralelo, tendrá un affaire amoroso con David y se hará amiga de Adele, con las complicaciones –secretos y mentiras– imaginables.
La relación matrimonial entre David y Adele es rara, tensa, complicada. El parece frío, seco, siempre con el gesto adusto. A ella se la ve contenida, mecánica, claramente «empastillada». Parecen funcionar con una mezcla de fastidio, súbita pasión y algunas cuentas pendientes. A lo largo de los episodios, la serie hará largos flashbacks hacia el pasado donde conocemos a Adele más joven, internada en una especie de hospital psiquiátrico tras la muerte de sus padres en un incendio. Ya está en pareja con David, pero se pasa todo el día allí con un joven también escocés, pero de clase baja, llamado Ron (Robert Aramayo), que parece escapado de TRAINSPOTTING.
Durante buena parte de sus episodios DETRAS DE SUS OJOS parece apostar a ser una suerte de thriller psicológico de tintes algo góticos, en el que dudamos de la estabilidad mental de Adele, de la posible violencia de David y de los problemas constantes en los que se mete Louise, la persona en apariencia más normal de los tres. Louise tiene una cuestión que la une a Adele: ambas tienen pesadillas muy vívidas que les dan la sensación de vivir experiencias muy reales. Y Adele la ayuda a manejarlas, controlarlas y hasta manipularlas a su antojo.
Toda esta serie de puntas cruzadas van armando un thriller en el que no sabemos muy bien no solo las relaciones entre el presente y el pasado sino la estabilidad mental y emocional de los protagonistas, y hasta su tibia conexión con la realidad. El director Erik Richter Strand va dando pistas un tanto «lynchianas» todo el tiempo de que lo que estamos viendo tiene algunas características extrañas, fuera de lo normal. ¿Hay algo del orden de lo psiquiátrico, del consumo de drogas (recetadas o no tanto) o más bien va por el lado de lo fantástico?
Hay un tinte un tanto genérico en todo el producto que le da una extrañeza en principio atrapante. Da la sensación de que lo que estamos viendo es una ficción actuada en código, de un modo similar a las citas a clásicas épocas del sitcom que hay en WANDAVISION. Pero de a poco empieza a dar la impresión que esa extrañeza va menos por el lado del disturbio psicológico y más por una elección formal un tanto insípida que intenta hacer dudar al espectador todo el tiempo acerca de qué es, realmente, lo que está viendo.
EN LOS PROXIMOS DOS PARRAFOS HAY POTENCIALES SPOILERS
La serie podría funcionar más o menos bien (un tanto mecánica y trillada, pero medianamente efectiva) como uno de esos thrillers que poblaban las pantallas de cine en los ’80 o ’90, derivados del éxito de ATRACCION FATAL o similares. Romances prohibidos, sexo furioso, pasado problemático, inestabilidad mental. Pero la novela apunta a más y a lo que llega –una explicación más propia del género fantástico– no solo se siente un tanto forzada e innecesaria sino que echa un tanto a perder hasta la propia complejidad psicológica que había logrado establecer.
Es una suerte de pase de magia que involucra conceptos definitivamente «lynchianos» (almas de personas que salen de un cuerpo y ocupan los de otras y cosas así) pero que no están incorporados estilísticamente como lo hace el propio David Lynch, quien crea un mundo extraño en el que eso –o cualquier cosa, en realidad– puede suceder. Acá el que hay que dar es un salto de credibilidad un tanto más grande que algunos encontrarán satisfactorio pero que en realidad parece más puesto para que el espectador, a lo largo de los dos últimos episodios, juegue a adivinar cuál es el truco. Piensen la resolución (o resoluciones) un segundo y se darán cuenta que con apenas unos cambios todo podría funcionar aún mejor sin esos giros fantásticos. Sería menos shockeante, sí, pero más consistente.
FIN DE ZONA DE SPOILERS
Como verán no fui muy específico con los spoilers, así que los que quieren ir a los detalles pueden hacerlo en los comments. Lo cierto es que es uno de esos finales que hacen revaluar lo visto y no precisamente de la mejor manera, ya que se abre a una serie de agujeros narrativos y genera la sensación un tanto frustrante de haber perdido el tiempo. Dependerá, claro, de cómo cada espectador se lleve con el recorrido un tanto extravagante que toma la miniserie. Aún adivinando qué es lo que está pasando, es difícil no sentir que es una resolución un poco tonta y banal, quizás aceptable en forma literaria pero bastante más difícil de transformar en imágenes, escenas y sobre todo en personajes que sean creíbles.
Una desilusión el final…. estaba re interesada y me intrigaba mucho el tema hasta q vi el final y me di cuenta q perdí el tiempo… una cagadaaaa
Si alguien tiene pensado perder el tiempo en algo que no se termina de entender, jueguesela y vea esta porquería. Bodrio total
Buenas, me pareció intrigante, después no la entendía y al final no me gustó, creo que perdí el tiempo…….
Cómo no la terminaste de entender??, es clarísimo el final.
A mí me gustó, pero termina siendo mediocre. Mis hijas adolescentes me dijeron que parece que la escribió un chico de 9 años.
A mí, no me gustó demasiado aburrida muy lenta en algunos pasajes
Me gustó, la ví completa en un día. Obviamente me gustaría una segunda parte, con un final diferente y más concreto.
Lo que yo entendi es que al final Adele es Rob x q tomo su cuerpo y mata a Louise y se hace pasar x ella, y el psiquiátra se casa con la supuesta Louise que es Rob. Es así?
Sara, yo lo veo igual. Atando cabos me di cuenta de lo mismo que tú diced
Es así. Hasta el hijo nota que quien está en el cuerpo de Louis no es su mamá
Sí, es siempre Rob, que es un poco ambiguo y bisexual y está enamorado de ella hasta que aparece el psiquiatra que genera algo en él que hace que termine perdidamente enamorado y además deseaba ese estilo de vida. Por eso Adele se droga, porque siempre fue Rob que no podía dejar su adicción.
Muy buena interpretación
No la vi pq tiene críticas bastante malas y la verdad no quiero sacarme la buena sensación q deja el libro donde todo cierra muchísimo más pq está contado de una manera en la q el final es igual de sorprendente pero no parece sacado de la galera. Como casi siempre, una mala adaptación de algo bueno
Recomiendo verla. Tengo muchas críticas, y la sensación que el final se hizo para una continuidad y sino es así, por favor , queda un gran pie para otra temporada. Estoy segura que a muchos le provocará una decepción que ante tal desarrollo , el final se resuelva de esa manera. Como dije más arriba, si tiene continuidad, realmente vale la pena verla.
El cine y producción super comerciales han adiestrado a todos para que todo esté explícito y no deje nada a la imaginación, intentando hacer lo contrario.
Entonces, esta producción me produjo incertidumbre, desasosiego, emoción, análisis, introspección, pausar y procesar… Me sorprendió al final. Y la respuesta estuvo desde que presentaron a Rob. Siempre estuvo ahí. Pero vendieron la serie tan bien que todo estaba puesto sobre Adele, para finalmente descubrir que, ella fue la víctima, que ni ella tuvo la oportunidad de amar, ni de vivir, entre otros.
Entonces, espero que Netflix renueve para la segunda temporada y que siga respondiendo a los interrogantes que dejó.
Sinceramente, espero
A mo me gustó..por lo menos la base del argumento sale de lo comun
A mi me gustó mucho, me la vi en un día, no me gustó que terminará así pero el final aún siendo así es igualmente shockeante.
Yo si la recomiendo para pasar unas buenas horas de intriga
Coincido totalmente con vos, una decepcion
Está buena, intrigante hasta el final, pero justamente el final no me gusto, pobre Adele, pobrecito Adam, Lois, que mala suerte la de David. No sé me dejó una sensación fea.
Me gustó mucho pero esperaba otro final. Algo más creíble ya que la historia parece real desde el comienzo y no fantástica.
Me pareció muy buena la actuación de la actriz que hace de Adele pero después de ver el final creo que debería volver a verla desde otra óptica.
Últimos dos capítulos decepcionantes. El final literalmente malísimo. Una pena
A mí también me gusto. Creo que sale de lo convencional y el final es inesperado. Me senti mal por Adele y por David porque realmente se amaban, pero creo que Louis tuvo su merecido.
No me queda claro si el personaje de David sabe al principio que Adele no es quien dice ser…. Algunas puntas indicaran que si (su frialdad, su imposibilidad de decirle te amo y la extraña conexión sexual entre los dos), pero sería raro que al final confíe tanto en Louise y no sospeche…. Cabos sueltos que le dicen
Me ha dado esa sensación a mí también
No, obvio que no lo sabe. Al menos en el libro. No se cómo lo resuelve la serie al final pero en la novela no tiene idea que un flaco obsesionado con él puede habitar cuerpos a su antojo. La frialdad de la relación viene por casarse con alguien de quien estuvo muy enamorado y de repente empezar a desconocerla totalmente. A medida q pasaron los años la relación quedó así, tirante y extraña
Una variante del vampirismo
Es increíble la resolución de la serie. Realmente cuando te lo desvelan puedes pensar: ui si, podría haberlo descubierto, pero el problema es que no sabíamos el límite de los viajes astrales hasta que nos enseñan que sí que se pueden cambiar de cuerpo.
*No intentéis solucionar el misterio durante la serie porque lo hacen de tal manera que no lo puedas saber hasta que te lo desvelan ellos.
Lo único que no me cuadra es el porqué Louise en la puerta de casa de ‘Adele’, decide tener un viaje astral si ya ha llamado a la ambulancia y a urgencias y van a llegar en breves… ¿quería verla muerta desde su mente? ¿Sin poder hacer nada más? No tiene ningún sentido, es lo único que me descuadra, por lo demás, muy buena.
Todo apuntaba a Adele como una desequilibrada, pero q final nos damos cuenta que ella siempre fue buena, y debido a su inocencia terminó como asesinada por su amigo.
Muy buena serie, me mantuvo siempre intrigada. y lo mejor es que saqué algunos tips sobre el manejo de los sueños que ya venía probando. En cuanto a los viajes astrales, he escuchado que es una práctica real, de hecho muchas personas anhelan poder hacerlo; pero yo jamás quisiera vivirlo, el solo pensarlo me produce ansiedad e incertidumbre, y ahora más que esta serie me ha mostrado un peligro no contemplado por los viajeros: salir de tu cuerpo para viajar a otras dimensiones y que cuándo vuelves ya está ocupado con otra entidad que no eres tú ¡uffff del terror!
El final de la serie me hace pensar qué ese David debe estar pagando un karma muy grande porque como tan mala suerte.
Los viajes astrales eran promovidos por Lobsang Rampa en los años 60
malísima!!! una falta de respeto total