Estrenos: crítica de «La terminal», de Gustavo Fontán (Sala Lugones)
El nuevo film del director de «El limonero real» es un retrato poético y documental de una pequeña estación de micros en el interior de la provincia de Córdoba. En la Sala Lugones desde el jueves 4 de abril.
Filmada casi en su totalidad en la estación de micros de La Falda, en la provincia de Córdoba, LA TERMINAL es un retrato del lugar a lo largo de lo que parece ser una misma noche, en la que se observan a los trabajadores del lugar, a pasajeros y a los diversos participantes de ese tan reconocible mundo de las pequeñas terminales de micros en esos horarios de bruma, oscuridad y quizás frío.
Si bien es una película casi sin diálogos, cada tanto se escuchan voces en off de dos personas –un hombre y una mujer– que suelen hablar de historias de amor, en su mayoría rotas, dolorosas o trágicas. Son los rasgos humanos que se advierten en medio de un escenario en el que personas de todo tipo se cruzan para no encontrarse jamás, una suerte de lugar de paso de almas, de historias y de experiencias.
Micros llegan, micros parten. La cámara de Fontán se detiene en los detalles, en cómo la luz quiebra la oscuridad, en la niebla, en los gastados carteles de lo negocios del lugar, en la gente sentada, esperando. Cualquiera que haya pasado un tiempo, preferentemente nocturno, en terminales semivacías o de lugares no muy grandes, conoce la experiencia. Y la película captura a la perfección esa mezcla de fascinación con tristeza, de encanto con melancolía que tienen esos escenarios que parecen seguir, inalterables, por el tiempo de los tiempos.
Sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín: Jueves 4, viernes 5, sábado 6 y domingo 7 a las 21. Martes 9, miércoles 10 y jueves 11 a las 18.
