
Cannes 2025: crítica de «Testa o croce?» («Heads or Tails»), de Alessio Rigo de Righi y Matteo Zoppis (Un Certain Regard)
Un cowboy italiano le gana una apuesta al mítico Buffalo Bill y se fuga con una mujer siendo perseguidos en la Italia de principios del siglo XX.
Uno de los subgéneros que subieron al calor de los cambios culturales de los años ’60 fue el del neo-western o anti-western, películas que transcurrían en épocas no necesariamente ligadas a las originales de las historias clásicas del Oeste y que se organizaban más como ecos o reflexiones sobre aquellas experiencias. Es la época de los travelling shows, en la que los hechos oscuros y violentos de la conquista del Oeste pasaron a transformarse en mitos y leyendas popularizadas, a veces, por sus propios protagonistas, que hacían un negocio a partir de vender (y agrandar) sus supuestas hazañas. Entre los varios films que trabajaron ese concepto está el de BUFFALO BILL AND THE INDIANS, de Robert Altman –que reformulaba políticamente el concepto de esos shows– y BRONCO BILLY, de Clint Eastwood, que lo llevaba al tiempo presente.
En TESTA O CROCE? («Cara o cruz», en castellano), lo que la dupla de realizadores italianos Alessio Rigo de Righi y Matteo Zoppis hacen es llevar esa mitología del western reflexivo del siglo XX a Italia. No es un spaghetti western en el sentido de que la película no incorpora rasgos estilísticos de ese género que, si bien se filmaba en Italia o España con estrellas y directores de esos países, transcurrían por lo general en los Estados Unidos, aunque sí suma algunos rasgos politizados que algunos films de aquellos tenían. En cierto sentido, la película es también un recorrido, a modo de paneo, por la historia misma del género, del clasicismo del primer episodio a los desvíos formales y narrativos que tiene luego y que lo llevan directamente a zonas surreales.
Todo empieza con un hecho supuestamente histórico, digamos que real. Buffalo Bill Cody (el actor estadounidense John C. Reilly, que funciona ocasionalmente a modo de narrador) llevó realmente su show de variedades del Oeste a Europa y varias veces paró en Italia. Dice la leyenda –esas que los realizadores toman habitualmente en sus películas, de BELVA NERA a REI GRANCHIO, pasando por IL SOLENGO— que en uno de esos show aceptó una apuesta de parte de cowboys italianos para ver quien ganaba en una competencia de doma y fueron, sorpresivamente, los butteri de la Toscana los triunfadores. A partir de ese mito, los realizadores construyen una trama con aventuras, fuga, romance, escapes, persecuciones y acción.

Los protagonistas son Rosa (Nadia Tereszkiewicz) y Santino (Alessandro Borghi). La primera está casada con un poderoso terrateniente (interpretado por Gianni Garko, el hoy octogenario actor famoso por su rol de Sartana en media docena de spaghetti westerns) que es el que hace la apuesta con la intención de que sus cowboys vayan «a menos», poniendo dinero en su derrota. Pero Santino se rehusa a hacerlo y gana igual la contienda, haciéndole perder dinero. Tras eso surge una pelea que termina de manera trágica cuando la propia Nadia mata a su marido y huye con Santino, escapándose hacia el sur del país. Previsiblemente y siguiendo también las reglas del género, ponen un precio sobre sus cabezas y los persiguen.
El film será el retrato cambiante de esa fuga, que arranca de una manera convencional pero se va deformando con el paso de los días. El escape inicial está rodeado del romance entre ambos y la pasión por la aventura que viven, pero pronto las circunstancias se empiezan a complicar, aparece el hambre, el frío y las disputas entre ambos. Algunas detenciones y escapes los llevan a toparse con un grupo de militantes políticos liderado por un peculiar anarquista de origen argentino (nada menos que Peter Lanzani, robándose con su energía y simpatía la película durante el rato en la que participa en ella) y eso deriva en enfrentamientos ya más de orden bélico. Y eso derivará en un tercer acto que toma características ya más surrealistas que no conviene adelantar.
Historia de amor, repaso por los modos del western, reversión de la historia italiana en códigos genéricos, TESTA O CROCE? propone un recorrido por los distintos formatos del género desde una perspectiva propia. Los paisajes no son los clásicos del western –hay más llanuras que desiertos o montañas–, hay más verborragia que la que tienen los clásicos silent type del formato y hay un romance con la aventura que le da un cierto lirismo y poesía a la propuesta. Western reflexivo, romántico, lanzado y sucio, un poco MC CABE Y MRS. MILLER, de Altman; otro tanto GIÚ LA TESTA, de Sergio Leone y con un poco del revisionismo histórico político de la época de los combativos intentos de unir el país, la película de Alessio y Matteo sigue construyendo una sólida y enigmática filmografía en la que la realidad y la fantasía, el cine y la vida, la mitología y la verdad se mezclan de formas inesperadas.