
Estrenos: crítica de «Nancy», de Luciano Zito (Gaumont)
Nancy trabaja limpiando casas en una pequeña localidad costera. Al conocer a Juan en el trabajo pone en tensión su frágil estado emocional, llevándola a hacer cosas impensadas. Con Camila Peralta y Luciano Ledesma. En el Cine Gaumont desde el jueves 8 de mayo.
Drama minimalista con algunos elementos de policial, NANCY, película de Luciano Zito, es un retrato de la chica que lleva ese nombre (interpretada por Camila Peralta), una joven que trabaja limpiando casas de vacaciones en una zona residencial de Villa Gesell. La abulia y la rutina laboral de esta tímida y, luego veremos, un tanto atormentada chica se quebrará a partir de algunos episodios curiosos: manchas de sangre en una sábana, ruidos de alarmas, nuevas casas que limpiar y algunas tensiones laborales.
A esta serie de cuestiones que la perturban hay que sumarle la aparición de Juan (Luciano Ledesma), un joven que repara cosas en una de las casas en las que Nancy trabaja y con quien parecen surgir a la vez dos cosas: un potencial y complicado interés romántico y otro más ligado a lo delictivo. Y si bien ese eje policial recorre de punta a punta el breve film –se ve que hay más robos que nunca en la zona–, el peso de la historia no pasa por ahí sino por seguir a la atribulada chica en sus intentos de salir del pozo en el que está.

Una dolorosa escena que tienen ambos en un auto que incluye un triste monólogo de Nancy (excelente, como siempre, Peralta) es el punto culminante y acaso la razón de ser de esta sencilla pero aguda película. Allí se entiende mucho mejor lo que vimos antes y lo que veremos después. NANCY –que participó en la reciente edición del BAFICI– es un film engañosamente simple, armado de climas enigmáticos (la música de Jackson Souvenirs aporta en ese sentido) y que transcurre en una ciudad costera otoñal, semivacía, habitada por enigmas, silencios y fantasmas personales.