Streaming: crítica de “Vida privada”, de Tamara Jenkins (Netflix)
Las complicaciones de una pareja de más de 40 por quedar embarazada es el punto de partida y eje de este drama con toques cómicos protagonizada por unos excelentes Kathryn Hahn y Paul Giamatti, como un matrimonio de intelectuales neoyorquinos que se enredan en complejos asuntos familiares y atraviesan fuertes crisis personales en función de ese objetivo. Una película notable, graciosa y emotiva.
Con bastante humor y una muy fina sensibilidad para capturar los complejos estados emocionales de una familia, Tamara Jenkins se mete en un tema complicado en VIDA PRIVADA, su nueva película. Protagonizada por los brillantes Kathryn Hahn y Paul Giamatti, cuenta la historia de los esfuerzos de una pareja por quedar embarazada. Por distintos motivos que se irán revelando con el correr de los minutos, Rachel y Richard no han podido/querido tener hijos antes. Y ahora —ella con 41 y él con 47 años— están decididos a lograrlo aunque sus probabilidades son muy bajas ya que ninguno es tan fértil como solía serlo. La larga y esforzada lucha de ambos por llegar a ese objetivo es el gancho narrativo de una película que en realidad habla de las relaciones de pareja, de padres e hijos y de los conceptos de familia en general, observando con momentos de mucho humor las idas y vueltas de esta búsqueda y el caos que produce.
Los protagonistas componen una típica pareja progresista neoyorquina que viene del mundo de la cultura (Richard es autor teatral pero vive de la venta de pickles, y Rachel, una escritora) y sus diálogos están salpicados de referencias a autores y cineastas, además de tener el filo y la ironía que muchas veces revelan el carácter “escrito” de sus dichos. Son bohemios burgueses de buen pasar (sin lujos, dicen, pero viven en el downtown de Manhattan) y han dedicado su vida a sus carreras. Pero cuando la película los encuentra están en plena búsqueda del bebé en cuestión. Intentan por todos los medios tecnológicos disponibles—algunas secuencias son hilarantes al respecto—, pero nada parece funcionar. Ya muy desgastados, les quedan pocas opciones: un vientre alquilado, donación de óvulos o la más complicada adopción.
La posible “tabla de salvación” es Sadie (Kalyi Carter), sobrina política de Richard, una chica de 25 años muy talentosa e inteligente pero algo perdida respecto a su futuro. Ella se lleva muy mal con sus padres (John Carroll Lynch y Molly Shannon) y, en cambio, adora a sus tíos neoyorquinos, artistas y cool. ¿Podrá ser ella parte de este proceso? Y de ser así, ¿qué repercusiones personales y familiares tendrá? Este disparador de la película le permite a Jenkins, en cierto modo, abordar dos temas en paralelo y complementar dos tonos distintos. Sí, es una película dramática sobre las dificultades de una pareja por concebir y lo que ello implica emocionalmente. Pero también una ácida comedia sobre relaciones familiares cuyo universo no está muy lejano al de filmes como los de Noah Baumbach aunque sin el costado físico/disparatado.
Es cierto que, en principio, uno tiene la sensación de haber visto este tipo de película indie decenas de veces. Su registro se acerca al típico film de Sundance, con su elenco de actores de teatro conocidos pero no híper famosos, su música sensible y cool adecuada a las circunstancias, sus diálogos llenos de comentarios ingeniosos y sus secuencias de montaje usando filtros tipo Instagram/Súper 8 o similares. Pero esos recursos, si bien hacen que la película sea puramente funcional en términos estéticos/audiovisuales, pasa a un costado en relación a la excelente historia, las emocionantes y a la vez muy graciosas performances de la mayoría del elenco y las aristas íntimas que logra tocar la película sin jamás ponerse excesiva y pomposamente “dramática”. Son tipos reconocibles pasando un problema complejo y tratando de resolverlo como pueden. A veces con dolor y sufrimiento. Otras, con mucho humor.
En algún punto, creo, acaso por compartir casi edades (y en cierto punto profesiones) con los protagonistas, que VIDA PRIVADA es una película sobre las nuevas formas y significados del término familia. El deseo de ser padres a costa de tensar una relación de pareja a límites insoportables y a postergar o negar problemas con sus carreras profesionales. Los hijos que eligen como padres a los que no son, biológicamente al menos, los suyos. Y las confusiones emocionales que todo esto pone en juego. Los más adultos y la joven del grupo creen tener todo claro en lo que respecta a estas nuevas formas de integración familiar, pero la confusión y el caos personal no siempre van de la mano con la toma de conciencia o el discurso que presentamos al mundo. La película de la directora de SAVAGES (que fue su último largo de ficción, hace once años) trata sobre el choque entre esas personas que queremos ser y las que, al menos por ahora, somos.
No coincido para nada Diego. Sobreexplicada y repetitiva. Un tema muy sensible si. TODA la escena de Thanksgiving y TODO lo de Molly Shannon es un cliché indie atrás de otro. Le sobra media hora, por lo menos. Paul Giamatti, eso si, está 10 puntos. Y la pendex tiene algo de Saorsie Ronan.
Me tocó doblarla al español. El foley de Thanksgiving con todos sus extras, el tío borracho, etc, un calvario!!!
Concuerdo contigo, thanksgiving fue una escena exagerada y de sobra, bien pudo no estar y no hubiera cambiado nada, el resto emociona y me hizo empatizar.
Quienes vemos esos tratamientos de fertilidad asistida no dimensionamos todo el proceso sicológico de los implicados, la película lo grafica muy bien, mi tia paso por ello y fue insostenible para toda la familia, finalmente adoptaron…pero extrañamente no fue el fin de su proceso, y como dice una de las lineas del film se hicieron «adictos a la fertilidad»,
Una obra divina…perfecta…
Me gusto. Creo que logra su cometido. Tema tedioso y facil para caer en golpes bajos. Aqui no aplican la formula llorona y si los dialogos agudos y las miradas con mil matices. Los dos actores (matrimonio) estan perfectamente y la chica los acompaña sin demerito. No parece una peli yanqui.
alguien conoce el nombre de los dos últimas temas musicales? cantante femenina
Nellie McKay, si mal no recuerdo…
Excelente película. Estoy de acuerdo con vos Diego. Yo no le pondría ni le sacaría nada. Me encantó Giamatti pero para mí la que se lleva lo laureles es Katrin Hahn. La cantidad de matices que tiene ésta mujer, no se pueden creer. Sin exagerar una pizquita, todo lo hace bien. No la conocía, ahora la voy a seguir.
Me pueden explicar el final? A quien esperan en el restaurante?
En respuesta a Marta, es una escena similar a la que ya sale a mitad de la película, cuando esperan chica que iba a ser madre de un niño que supuestamente iba a entregarles a ellos y no aparece, resultando ser un fraude. Con la escena final queda claro que vuelven a intentarlo, pero ya se queda ahí, en abierto. Se da a entender que siguen buscando niño y que el matrimonio está unido.