Festivales/Mar del Plata: Panorama – Autores (14 críticas)
Aquí irán apareciendo las críticas de la sección Autores, dedicada a los cineastas más consagrados y célebres que se presentan en el festival. Para ir anotando, ya están las críticas de lo nuevo de Varda, Lanzmann, Kitano, Haynes, Linklater y Hong Sangsoo, entre otros. Y se irán sumando…
120 BEATS PER MINUTE, de Robin Campillo. Leer crítica aquí
BARBARA, de Mathieu Amalric. Leer crítica aquí
THE DAY AFTER y CLAIRE’S CAMERA, de Hong Sangsoo. Leer críticas aquí
EN EL SEPTIMO DIA, de Jim McKay.
Una historia simple y clásica a la que la veracidad de los personajes y de la puesta en escena le da un elemento extra invalorable. Al protagonista del filme, a lo largo de su «bíblica semana», le toca tomar una decisión que puede modificar para siempre su futuro. Es un inmigrante mexicano que está viviendo en la zona de Nueva York y tiene un trabajo como delivery boy de comidas en un restaurante, pero a la vez mantiene su contacto con su comunidad y amigos jugando en el competitivo equipo de fútbol que tiene. Pero el trabajo y la pasión chocan (tiene que trabajar el día de un partido clave) lo que lo lleva a dudar acerca de sus prioridades: el trabajo, los amigos, el futuro. McKay encuentra una manera muy realista y creíble de llevar adelante ese conflicto por más «precisamente guionado» que parezca. Y ese realismo que dan los no actores y las locaciones reales permiten que el cuento funcione y afecte personalmente al espectador de una manera que un filme con el mismo disparador narrativo jamás podría hacer.
FELICITE, de Alain Gomis. Leer crítica aquí
LAST FLAG FLYING, de Richard Linklater. Leer crítica aquí
MRS. FANG, de Wang Bing.
La lenta y segura muerte de la mujer que da título a la película –una sexagenaria en la etapa terminal de la enfermedad de Alzheimer– es el eje que mueve los acontecimientos de este nuevo documental de Wang Bing, premiado con el Leopardo de Oro en Locarno. Pero su larga y casi escalofriante estancia en una cama es apenas el centro del mundo que Wang explora. A través de su rostro, que parece extrañamente acusatorio o asombrado por lo que la rodea, vemos a lo que parece ser su extendida familia hablar sobre su estado y observarla, sin que la figura de un médico aparezca, esperando la llegada de la muerte. Ese «coro» de observadores sigue también con sus vidas y para Wang esa relación entre la vida y la muerte en un mismo espacio es lo que importa, observar cómo las miserables condiciones económicas de los protagonistas no les permite hacer otra cosa que seguir con sus trabajos para sobrevivir (la pesca, principalmente) mientras la vida de la Señora Fang, de a poco, se extingue, inevitable y brutal.
NAPALM, de Claude Lanzmann.
Los recuerdos de un antiguo viaje a Corea del Norte en los años ’50, con un grupo de intelectuales franceses, conforman el centro de la nueva película del consagrado realizador. El filme, que se apoya en un texto de su autobiografía, lo lleva a volver a visitar –permanentemente vigilado y acompañado, tanto entonces como ahora– el país, y en este viaje, además de centrarse en la compleja situación política del país a lo largo de la historia y ahora, con sus grandes contradicciones, el director de SHOAH se detiene para irse de lo público a lo personal y contando una historia de amor que vivió entonces allí. Casi todo se centrará en su relato de aquella historia, pero los detalles esenciales de esa vivencia siguen resonando en el realizador hasta hoy. Y si bien el filme no está entre lo mejor de su obra, es una curiosa ventana a una zona más íntima del director, una que unusualmente no deja ver. Al menos, no públicamente.
OUTRAGE CODA, de Takeshi Kitano. Leer crítica aquí
THIRST STREET, de Nathan Silver
La nueva película del prolífico realizador norteamericano es una historia de amor y obsesión que, si bien desde la premisa narrativa puede parecer convencional o tradicional, puedo asegurarles que no hay nada de eso… cinematográficamente hablando. La protagonista del filme es Gina, una azafata cuyos constantes viajes hacen caer a su novio en una depresión que lo lleva al suicidio. Poco después de ello, en un viaje a París conoce a un hombre francés con el que se obsesiona al punto de no darse cuenta jamás que, para él, ella significa poco y nada.
La situación se complicará con la llegada de otros personajes (un night club es central a la historia) y momentos entre curiosos, tensos y también divertidos, pero el realizador de SOFT IN THE HEAD prefiere apostar por una mezcla entre el absurdo y el extrañamiento, convirtiendo la obsesión cada vez más inexplicable de Gina por ese sujeto en una especie de muestrario de los muchos choques culturales que existen entre norteamericanos y franceses, entre los cuales temas como el amor, el sexo y la fidelidad son tan centrales como relevantes. Una película de espíritu europeo (especialmente en lo formal, por el uso de la luz y la voz en off) hecha por alguien que, desde el otro lado del charco, trata de entender e interpretar cinematográficameente esas diferencias.
THREE BILLBOARDS OUSIDE EBBING, MISSOURI, de Martin McDonagh. Leer crítica aquí.
VISAGES VILLAGES, de Agnés Varda y JR. Leer crítica aquí
WONDERSTRUCK, de Todd Haynes. Leer crítica aquí