Lo mejor de 2024: 50 películas argentinas

Lo mejor de 2024: 50 películas argentinas

Acá va un segundo listado del año que termina. En este caso, un Top 50 de películas argentinas estrenadas en salas de cine, en plataformas de streaming o vistas en festivales.

Hace pocas semanas, el presidente del INCAA dijo, sin que se le cayera la cara de vergüenza, que el cine argentino perdió el rumbo en el años 2000 y que las películas que se hicieron después de esa fecha eran muy malas. Esa absurda y disparatada afirmación –acompañada luego por la desafortunada frase de conectar al «cine independiente» con la tortura— no solo es errónea sino que hasta se podría argumentar exactamente lo contrario, que el cine argentino entró en la mejor etapa de su historia a partir de esos años (un poco antes, en realidad). Más allá de esas boutades para la «hinchada libertaria», lo cierto es que el cine argentino ha venido demostrando estar entre los mejores y más variados del mundo hace ya bastante tiempo.

Lo cierto es que esas palabras no son inocentes, ya que el que las dijo es responsable de las políticas de fomento del INCAA, lo que hace pensar que tiene muy en claro qué tipo de cine no le interesa apoyar. Es por eso que, de seguir con esa «filosofía», habrá que empezar a pensar en un ciclo –digamos, 1997 a 2024– que puede estar empezando a terminarse. De todos modos, los cineastas argentinos seguramente irán encontrando la manera de sobrevivir a esta brutal reducción de los recursos oficiales de financiamiento al cine. Se trata de un grupo caracterizado por la resiliencia y se las arreglarán para conseguir recursos y seguir filmando. Pero serán menos, muchos menos y con muchísimas limitaciones.

Mientras tanto, y hasta que las consecuencias del parate no se sientan en la producción acumulada, el cine argentino sigue vivo y llamando la atención. Este año LOS DELINCUENTES –una película que se estrenó acá en 2023– apareció en la lista de mejores películas del año en la prestigiosa revista francesa de cine Cahiers du Cinéma, como lo había hecho el año pasado con otra película argentina, TRENQUE LAUQUEN, de Laura Citarella. De seguir la tendencia, es muy probable que algún otro film nacional (tengo puestas las fichas en mi «número 1») figure en el Top 10 del año próximo.

Sí, mal que le pese a Pirovano y a sus secuaces de las redes sociales, el cine argentino sigue vivo y funciona en todo el mundo. Y por más que moleste a los escribas de algunos diarios que solo saben contar espectadores en salas de cine oficiales, sus películas circulan por el mundo vía festivales, distribución comercial, televisiva, en streaming o hasta por la vía de la piratería. Sí, fue un año malo para el cine nacional en lo comercial en las salas locales, eso es muy cierto, pero el mejor cine argentino no siempre fue acompañado por cantidades enormes de espectadores, por lo que ese problema habrá que buscarlo por el lado del poco interés que despertaron las propuestas más comerciales.

Así que dedico este espacio a reparar en 50 películas nacionales que valen la pena y que se vieron a lo largo de 2024, en salas, festivales, plataformas o por otras vías. Como digo siempre, no todas son obras maestras ni extraordinarias películas, pero se trata de films valiosos que dejan constancia de lo variado, ecléctico y potente de un cine argentino que, por motivos que solo pueden explicarse como parte de una absurda batalla cultural, el nuevo gobierno quiere destruir. No le será fácil.